La participación política y la presencia de mujeres en cargos de elección popular es fundamental para una democracia sólida e inclusiva. Mientras más mujeres ocupen cargos de poder, será más probable que su voz sea escuchada y que las desigualdades de género sean consideradas como parte de la discusión pública. Como indicó Marcela Ríos, Representante Adjunta del Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo en Chile, “los partidos políticos son fundamentales para la representación política de los ciudadanos y las ciudadanas y dotar de legitimidad a la democracia. Ellos representan los intereses de la ciudadanía y sirven de nexo con el estado. Juegan también un rol en la formación y promoción de las personas que ocuparán cargos de poder. De ahí la importancia del compromiso que hoy asumen, compromiso con la promoción de la igualdad entre mujeres y hombres, así como también con el empoderamiento e impulso a las mujeres para aumentar su participación en la toma de decisiones”.
En los últimos años, Chile ha ido emparejando las reglas del juego político impulsando distintas iniciativas legales para promocionar y fomentar la participación de las mujeres en los partidos y en cargos de elección popular. Las medidas llevadas a cabo constan principalmente de incorporación de cuotas de género en elecciones legislativas, paridad de género en los órganos de dirección interna de los partidos e incentivos otorgados a través del financiamiento político electoral, los que exigen que un 10% de la subvención recibida sea invertida en fomentar la participación de mujeres. Estas reformas han sido acompañadas por una fiscalización activa de su cumplimiento, generando un punto de inflexión respecto de las condiciones en las que las mujeres participan y pueden competir en la esfera política.
Para contribuir a enfrentar estos desafíos y apoyar a los partidos a desarrollar políticas integrales que aseguren igualdad de condiciones para mujeres y hombres, el Ministerio de la Mujer y la Equidad de Género, el Servicio Electoral y el Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo, han generado una alianza estratégica de trabajo conjunto con el objetivo de promover y fomentar la participación de mujeres en política, materializando así la promoción de la igualdad de derechos y oportunidades de estas en la política.
Para estos efectos, impulsarán una estrategia de acompañamiento a todas las organizaciones políticas con el propósito de implementar las adecuaciones internas y cambios culturales necesarios que permitan cumplir con la nueva legislación electoral, estándares internacionales y buenas prácticas existentes en materia de participación de mujeres en política y adecuado uso del financiamiento público. Esta planificación contempla un autodiagnóstico por parte de cada partido que se sume a esta iniciativa y de un plan de trabajo que lleve a las colectividades a la elaboración de un ‘código’ de participación de mujeres en política, en período aproximado de seis meses.
En una ceremonia que se llevó a cabo el pasado 20 de agosto en la sede del Congreso Nacional en Santiago, representantes de los partidos firmaron el compromiso de trabajo para promover la participación de las mujeres en política. En este contexto, la Ministra de la Mujer y la Equidad de Género, Isabel Plá, manifestó que el acuerdo busca “ayudar a los partidos políticos -con respaldo y apoyo técnico- para que generen sus propios programas para mejorar la participación femenina y romper el techo de cristal que hoy enfrentan las mujeres en política”.
El compromiso fue suscrito por 18 de los veinte partidos constituidos en Chile. En la convocatoria, el Presidente del Consejo Directivo del Servicio Electoral, Patricio Santa María, señaló que “para los partidos, que son fundamentales en el sistema democrático, el Servicio Electoral quiere transformarse no solamente en un ente fiscalizador sino también colaborador, a fin de ayudar en aquellas normas legales que requieren implementarse en el tiempo; porque si se mantienen las leyes y no hay un trabajo proactivo no vamos a seguir progresando”.
Esta demanda por igualdad de género se ha extendido en Chile y el mundo como un imperativo en distintos ámbitos, incluyendo el plano político y electoral. Asegurar que las mujeres puedan acceder a cargos de poder y participar en política es responsabilidad no sólo del Estado, sino también de la sociedad civil y de los partidos políticos, de manera particular. La alianza entre estas instituciones busca justamente contribuir a avanzar en este desafío colectivo, promoviendo que haya más mujeres en política, que sus intereses sean efectivamente representados, y fortalecer así una democracia más inclusiva.