Análisis es elaborado por la UCR y el PNUD para consulta pública, con el fin de proveer datos accesibles y gratuitos sobre las diversas realidades cantonales
Atlas de Desarrollo Humano Cantonal expone rezago y desigualdades en sectores más vulnerables en Costa Rica
4 de Noviembre de 2020
San José, 04 de noviembre, 2020. Con el fin de promover evidencia sobre las tendencias, asimetrías y oportunidades sobre desarrollo humano con que cuenta el país, el Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD) y la Escuela de Estadística (EEs) de la Universidad de Costa Rica (UCR), presentaron este miércoles el Atlas de Desarrollo Humano Cantonal 2020.
Dicha investigación contribuye a la comprensión de las distintas realidades cantonales que conviven en Costa Rica y que requieren ser tratadas de manera diferenciada.
“Es urgente que el abordaje de los desafíos que enfrentan nuestras sociedades, agudizados gravemente por la pandemia del COVID-19, esté basado en información verificada, obtenida por medios científicos e interpretada por análisis técnicos especializados. Esa es la razón de ser de esta alianza entre la UCR y el PNUD”, señaló José Vicente Troya Rodríguez, representante del PNUD.
Según el más reciente análisis, Costa Rica avanza en mejorar las condiciones de vida de sus habitantes, pero no lo suficientemente para alcanzar a las regiones y personas históricamente en mayor condición de vulnerabilidad -zonas rurales, periféricas y mujeres. Ese es el principal resultado del Atlas 2020 que se nutre de la aplicación de la familia de índices a nivel cantonal:
- Índice de Desarrollo Humano cantonal (IDHc);
- Índice de Desarrollo Humano ajustado por Desigualdad (IDH-D);
- Índice de Desarrollo de Género (IDGc);
- Índice de Desigualdad de Género (IDG-D).
“El análisis de los datos permite llegar a la conclusión de que existe una mejora en las condiciones de desarrollo humano en nuestro país en el periodo 2010-2018, pero con un grave freno ante la desigualdad persistente”, señaló Paola Omodeo Cubero, especialista en Estadística y responsable del estudio.
La alarma de la desigualdad se eleva
Con relación a los mapas de 2018, ajustados al Índice de Desarrollo Humano por Desigualdad (IDH-D), se puede detectar un considerable cambio en la situación del país.
A pesar de la mejora en las condiciones de desarrollo humano, en Costa Rica persisten importantes desigualdades entre los cantones del país y por regiones. Los cantones de las regiones Huetar Norte, Huetar Caribe y Brunca muestran un rezago respecto al resto del país.
Debido a esa brecha territorial, nuevamente cantones del Caribe (Matina, Talamanca), del Norte (Los Chiles) y de la Zona Sur (Buenos Aires) vuelven a estar en los últimos lugares en la clasificación del IDH y el IDH-D.
Priorizar la urgencia de atender la desigualdad de género
Las mujeres tienen menos acceso a las oportunidades del desarrollo humano, especialmente por brechas económicas. La desigualdad de género sigue siendo un reto urgente y pendiente de Costa Rica, mostrando apenas algún avance en la última década.
El desarrollo humano de género más alto se encuentra en los cantones centrales del país (al igual que el IDH) y poco a poco se va extendiendo al Pacífico Norte y el Pacífico Sur. Por el contario, los cantones fronterizos son los que presentan mayores retrocesos en este tema, situación que no muestra avances del año 2010 al 2018.
En cuanto a los resultados que arroja el estudio, el Atlas muestra la necesidad de orientar acciones de política pública hacia cambios, a menudo estructurales, para mejorar el desempeño de las instituciones del Estado costarricense:
1. La educación es prioridad: el país debe aumentar sus esfuerzos para reducir el abandono de estudiantes del sistema educativo, mejorar la accesibilidad, calidad y pertinencia de la educación, principalmente en la secundaria.
2. Las realidades cantonales requieren ser tratadas de manera diferenciada: la inversión pública y las estrategias de desarrollo deben responder a las necesidades y oportunidades observadas en cada cantón.
3. El país debe visibilizar y enfrentar las privaciones y desafíos de poblaciones y personas en situación de exclusión y con menos oportunidades de cada cantón: mujeres, jóvenes, pueblos indígenas, población afrodescendiente, personas con discapacidad.
4. Lograr la igualdad de oportunidades entre hombres y mujeres debe ser una prioridad.
“Es imperativo que la construcción e implementación de las políticas públicas contemplen la diversidad y complejidad de los desafíos, desde un análisis interseccional, para reconocer la necesidad de diseñar soluciones diferenciadas que correspondan a las formas distintas en que las personas y comunidades sufren las privaciones, brechas y obstáculos que les impiden ejercer plenamente sus libertades”, puntualizó Fernando Ramírez Hernández, director de EEs-UCR.
Los resultados incluidos en las versiones anteriores del Atlas no pueden ser comparados con los actuales, dado que hay cambios metodológicos y ajustes que se realizan cada vez que se publica una actualización. Por ese motivo, la nueva herramienta presenta los cálculos de los índices a partir de 2010 y hasta el 2018, a fin de permitir el análisis comparativo, en ese período, bajo la misma metodología de análisis. Ingrese a www.cr.undp.org para ver la información.