• El proyecto reúne a reconocidas instituciones para generar conocimiento sobre los temas nacionales, así como el diálogo democrático inclusivo en el marco del proceso electoral de Costa Rica.
• Los insumos están disponibles, y al alcance de la población, en el sitio www.ruta2030.cr

Con el objetivo de facilitar información verificada, disponible y asequible para mejorar el debate político y promover el diálogo democrático, informado e inclusivo en Costa Rica, el Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD), lanza la iniciativa “Construyendo una ruta común hacia el 2030”.

Esta iniciativa agrupa a cinco reconocidos socios estratégicos: Facultad Latinoamericana de Ciencias Sociales (FLACSO), Sede Costa Rica, el Instituto de Estudios Sociales en Población (IDESPO), el Centro Internacional de Política Económica para el Desarrollo Sostenible (CINPE), ambos de la Universidad Nacional (UNA), así como el Observatorio de Desarrollo (OdD) y la Escuela de Estadística de la Universidad de Costa Rica (UCR).

El proyecto pone a disposición de agrupaciones políticas, sector académico, sector privado y población general, información que contribuye a la reflexión sobre nuevas realidades y alternativas de desarrollo en concordancia con los avances y desafíos que enfrenta Costa Rica en temas clave  como la igualdad de género y el empoderamiento económico de las mujeres, la participación política de las mujeres y las personas jóvenes, la creación y fortalecimiento de oportunidades de empleo y emprendimientos, el fortalecimiento del sistema de protección social y la construcción de un modelo de economía verde, entre otros.

“La desinformación socava la democracia y la libertad de elegir que tienen todas las personas, por lo que proyectos de esta naturaleza, que combaten las noticias falsas y la difusión de información errónea, fortalecen a la sociedad y a la generación de alternativas de desarrollo sostenible. Desde PNUD esperamos apoyar la construcción de sociedades más inclusivas y resilientes, especialmente tras la crisis socioeconómica ocasionada por la COVID-19”, señaló José Vicente Troya Rodríguez, Representante Residente del PNUD.

El proyecto destacó la necesidad de reconocer la importancia de la población joven, quienes representarán cerca de un 40% del padrón electoral.

Según los hallazgos identificados con el apoyo de FLACSO, hay problemas muy claros en función de lo que distinguen las y los jóvenes, tales como dificultades de acceso a empleos dignos y a políticas que promuevan verdaderas oportunidades de movilidad social en el país, las brechas de género y desestímulos para emprender. “Estos son solo una parte de los obstáculos citados por las personas jóvenes, frente a ellas es indispensable el planteamiento de propuestas en los planes de gobiernos que se conduzcan a responderlas y que reconozcan en estas voces las oportunidades de mejora en las condiciones de vida de las personas jóvenes” indicó Ilka Treminio, Directora de FLACSO Costa Rica.

En esta misma línea, Nelly López, directora del IDESPO reforzó el mensaje de reconocer la necesidad de hacer partícipe a los jóvenes dentro del proceso de identificación de soluciones, para atender los problemas que les afectan.

Retos identificados en el horizonte cercano.

Dentro de las diferentes investigaciones realizadas en el marco de este proyecto, salen a relucir los enormes retos sociales, económicos y en materia de derechos humanos que complejizan la toma de decisiones en una sociedad dinámica y en constante evolución que además cuenta con muchísimos medios de información.

Esos retos reconstruyen uno a uno, la realidad con la que se enfrentan muchos sectores de la sociedad costarricense, pero a su vez los planteamientos que desde diferentes ámbitos se proponen para superar la crisis y renovar el pacto social. Las diferentes investigaciones muestran algunas preocupaciones o debilidades:

• Un crecimiento inconstante y decreciente (periodo del 2010 al 2020);
• Deterioro de indicadores sociales y las finanzas públicas;
• Hay procesos de desafección y desconfianza de las personas jóvenes en el sistema político;
• Sesgo de género en cuanto a las asignaciones laborales y las oportunidades de inserción en el mercado;
• Se percibe una desconexión entre el discurso ambiental del país y las acciones que se toman e incentivan;
• Las personas trabajadoras jóvenes perciben una economía frágil, dificultad de competir y obtener estabilidad laboral;

Asimismo, se muestra la urgente necesidad de generar una agenda de inversión pública que atienda las particularidades de cada región, grupo etario y género, en un marco de una economía verde:

• Se requiere reformar las opciones de cuidado de personas menores y dependientes, destacando que es un tema que debe ser de corresponsabilidad y de colectividad;
• Se plantea la necesidad de mostrar acciones de incidencia ambiental que lineen el discurso costarricense con las acciones de la sociedad;
• Mejorar aspectos de recaudación y proponer mecanismos que incentiven la creación de empleo y emprendimientos.

Sobre estos hallazgos el director del CINPE-UNA, Olman Segura, manifestó que: “es necesario reforzar la gobernabilidad democrática para superar la fragilidad fiscal, clave para ayudar a aliviar la pobreza y la inequidad, así como acelerar reformas para racionalizar y simplificar las estructuras contributivas”.

En esa misma línea, Carlos Murillo, director del Observatorio del Desarrollo de la UCR, señaló que “es fundamental analizar y establecer mecanismos que permitan el desarrollo de iniciativas que conecten empleo, políticas de educación y economía verde, en preparación para los próximos retos”.

Contar con información oportuna sobre las diferentes necesidades y propuestas de desarrollo, en un momento clave como el que estamos viviendo es, sin dudarlo, la oportunidad de impulsar una vía hacia el crecimiento inclusivo, solidario y sostenible, que nos permita no dejar a nadie atrás.

Acceso a la información y detalles sobre estas y otras investigaciones, puede visitar www.ruta2030.cr