Reducir la incidencia del VIH en el país y las muertes relacionadas con el sida, cerrando brechas en la prevención y la atención es el objetivo del proyecto “Expansión de los servicios diferenciados de VIH para grupos de poblaciones clave en la República de Cuba” que se inaugura en 2024 y se extenderá hasta 2026. El proyecto es resultado de la cooperación entre el Ministerio de Salud Pública (MINSAP), el Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD) y el Fondo Mundial de Lucha contra el Sida, la Tuberculosis y la Malaria (Fondo Mundial), en apoyo a la Respuesta Nacional al VIH.

El nuevo proyecto apunta a reforzar la implementación del Plan Estratégico Nacional para el control de las ITS, el VIH y las hepatitis 2024-2028.

Para ello, promoverá la ampliación de la cobertura de los servicios de prevención y diagnóstico del VIH, incluyendo el uso de herramientas innovadoras como la terapia preexposición, de probada eficacia como método preventivo, y las autopruebas de VIH, con énfasis en las poblaciones más vulnerables a contraer el virus; que, para el caso de Cuba, son los hombres que tienen sexo con hombres (HSH) y las personas transgénero. El proyecto también apoyará el suministro de medicamentos antirretrovirales de calidad y el monitoreo de la carga viral de las personas que viven con VIH.  

Para mejorar la eficiencia y calidad de los servicios y facilitar el acceso de las poblaciones vulnerables a la atención sanitaria, el proyecto aportará al mejoramiento de las capacidades técnicas de actores fundamentales de los servicios relacionados con el VIH, como el personal de salud, sobre todo en el primer nivel de atención, y las organizaciones de la sociedad civil que reúnen a las poblaciones clave.

Reducir las barreras que pueden limitar el acceso de estas poblaciones a los servicios de salud, es otra de las líneas de trabajo centrales del proyecto e incluye la promoción de prácticas que permitan reducir el estigma, la discriminación y las desigualdades de género. 
 
La iniciativa también dará continuidad al fortalecimiento de los sistemas digitales de información y de monitoreo del VIH para contribuir con la calidad de los servicios.

Desde el 2003, la Respuesta al VIH en Cuba se ha articulado sobre la base del trabajo conjunto entre el MINSAP, las organizaciones de la sociedad civil, el PNUD, otras agencias del Sistema de las Naciones Unidas en Cuba y el Fondo Mundial. El nuevo proyecto se conecta y da continuidad a esta labor cooperada, que se ha venido consolidando por más de veinte años. 
 
En 2023, fruto de esa colaboración antecedente, el 75.6% de las personas que viven con VIH en el país conocían su estado serológico. De ellas, el 86.7% recibía terapia antirretroviral y el 88.7% logró supresión viral. Por otro lado, 146 458 personas de las poblaciones clave (144 288 HSH y 2 170 trans) recibieron servicios de prevención y 168 492, accedieron al diagnóstico de VIH (166 057 HSH y 2 435 trans).