El 27 de septiembre es el Día Mundial del Turismo, declarado por la Organización Mundial del Turismo de la ONU. Este año, el tema es “Invertir en las personas, el planeta y la prosperidad”, reflexionando sobre cómo la crisis de COVID-19 presentó una oportunidad de redefinir cómo debe invertir el sector para crear un futuro más sostenible para las personas, el planeta y la prosperidad.

Esto fue lo que hicimos en Las Terrenas, donde recientemente cerramos el programa de “Recuperación socioeconómica inclusiva, sostenible y resiliente de la cadena de valor del turismo en República Dominicana”, que estuvimos implementando codo a codo por 18 meses acompañando a la institucionalidad local y gobierno central, en articulación con la Organización Internacional del Trabajo (OIT), mipymes, sector privado y organizaciones comunitarias para desarrollar y fortalecer la cadena de valor del turismo sostenible de las empresas y emprendedores de Las Terrenas, El Limón y las Galeras.

La estrategia de implementación sentó las bases para el desarrollo de una industria local turística dinámica, más verde y con lentes de igualdad de género, beneficiando directamente a 581 personas emprendedoras e indirectamente a 1,743 personas, y aterrizando una ruta metodológica para acompañar a mipymes en una escala mayor.

El turismo es uno de los sectores que más aportes hace a la economía y al empleo de la República Dominicana, impactando la calidad de vida de las personas de este hermoso país. La actividad de mayor contribución al resultado del PIB en el año 2022 fueron los hoteles, bares y restaurantes, al registrar una expansión interanual de 24% en su valor agregado real según fuentes del Banco Central. 

Sin embargo, los impactos de la crisis de COVID-19, y el paso del huracán Fiona afectaron la cadena de valor de turismo en esta zona, impactando de manera desproporcionada a las mipymes, sobre todo a los emprendimientos liderados por mujeres y los trabajos informales, profundizando las desigualdades preexistentes. 

Un dato no menor, es que, si bien las mujeres representan el 53% de la fuerza de trabajo del sector, más de la mitad de ellas se encuentran en la informalidad laboral, con todas sus implicaciones: menores salarios, desprotección en salud y demás beneficios de la seguridad y la protección social. Desde el PNUD, como aliado estratégico para el desarrollo sostenible del país, acompañamos esfuerzos locales y nacionales para acelerar la recuperación sostenible del sector ante estos desafíos de desarrollo. 

Mediante un análisis sistémico y utilizando metodologías innovadoras (Systems Thinking/Problem Space), desarrollamos una propuesta de valor para impulsar una agenda de Turismo a Prueba de Futuro, y consolidar una recuperación inclusiva, sostenible y resiliente, logrando movilizar recursos a través del mecanismo Funding Windows del PNUD, con apoyo financiero del Gran Ducado de Luxemburgo.

Con esta iniciativa, dimos un paso importante para seguir construyendo sobre estos logros y transitar hacia un turismo que fomente la participación plena de todas las personas, incluidas las personas con discapacidad, con prácticas responsivas de género orientadas a garantizar la seguridad de todas las mujeres, previniendo los diferentes tipos de violencia de género y acoso en las zonas turísticas. 

Apostamos a adoptar las mejores prácticas para la innovación en la cadena de valor turística, aprovechando nuevos nichos o mercados emergentes como los nómadas digitales y promoviendo la sostenibilidad en zonas turísticas.

El portafolio de herramientas que pusimos a disposición de las autoridades locales de Las Terrenas coloca las personas al centro, garantizando el cumplimiento de un sistema basado en derechos, sensible al género, que promueva el aprovechamiento del capital humano y dinamice el sector para incrementar su competitividad en el largo plazo, y todo esto quedó plasmado en Plan Municipal de Desarrollo de Las Terrenas integral y con visión a prueba de futuro.

Como instrumento al servicio de los países y las personas, desde PNUD seguiremos acompañando y aportando experiencias globales para seguir construyendo juntos una cadena de valor de turismo sostenible, resiliente, inclusiva y con igualdad de género, sin dejar a nadie atrás.