Sí es posible la economía circular en El Salvador
8 de Junio de 2023
(Artículo publicado por La Prensa Gráfica, edición 5 de junio de 2023).
¿Sabías que la forma en que producimos, consumimos y desechamos el plástico, principalmente el de un solo uso, está afectado el bienestar (y la supervivencia) de las personas y del planeta?
La gestión del plástico se caracteriza por un modelo de producir, consumir y desechar que está afectando y limitando el camino hacia el cumplimiento de los Objetivos de Desarrollo Sostenible al 2030. Tenemos que actuar con urgencia.
Seguramente ahora te preguntas qué relación tiene el plástico con tu bienestar. Te damos algunos ejemplos:
- Cuando los plásticos llegan a los ecosistemas terrestres y marinos, los animales lo ingieren y, de esa manera también los microplásticos ingresan a la cadena alimenticia humana.
- Las partículas de plástico al llegar a los ríos y suelos afectan nuestra seguridad alimentaria y nutricional.
- Los plásticos generan emisiones de Gases de Efecto Invernadero (GEI) en cada etapa de su ciclo de vida, por lo tanto, alimenta la crisis climática y como parte de esto tenemos crecientemente fenómenos más extremos como las sequías prolongadas, olas de calor, lluvias torrenciales y otros.
- La gestión inadecuada de los desechos como los plásticos limita la capacidad de los países para cumplir los objetivos climáticos globales de reducir emisiones de GEI plasmados en las Contribuciones Nacionalmente Determinadas (NDC, por sus siglas en inglés).
El reporte especial “Desarrollo Humano en El Bicentenario”, publicado en 2022 por el PNUD El Salvador, señala que los hogares salvadoreños son vulnerables a los efectos de la degradación ambiental y del cambio climático debido a privaciones en el acceso a servicios básicos, al ejercicio de prácticas contaminantes y a la exposición a riesgos ambientales, aspectos que reflejan desbalances en las relaciones con el Planeta.
Actualmente, la Organización de las Naciones Unidas trabaja en una hoja de ruta para contribuir a dar soluciones para el problema mundial de la contaminación por plásticos con un nuevo acuerdo internacional para poner fin a la contaminación por plásticos y que sea jurídicamente vinculante, el cual se espera esté listo en 2024.
La Agenda de Desarrollo Sostenible 2030, es un espacio de encuentro para proponer e implementar soluciones a los diferentes retos nacionales y globales como la reducción del plástico de un solo uso. Por ello, para tomar acción en El Salvador, impulsamos un diálogo plural para intercambiar visiones y profundizar la discusión sobre las soluciones multidimensionales que nos permitan abordar juntos uno de los principales desafíos climáticos, ambientales y de salud de la actualidad.
Se trata de una iniciativa que como PNUD estamos impulsando junto a la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO), la Organización Internacional para las Migraciones (OIM) y con el apoyo técnico del Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente (PNUMA).
Ya hemos dado el primer paso, hace algunos días realizamos el foro “Oportunidades para la Gestión Sostenible del Plástico de un solo uso en El Salvador”, un espacio donde confluyeron actores públicos, privados, comunitarios y de la academia, exponiendo lo que ya están haciendo para reducir la contaminación por plástico.
Es momento de unirnos y caminar juntos en una sola dirección. Una de las alternativas que ponemos sobre la mesa es tomar el camino hacia el fomento de la economía circular, que se concibe como un sistema de aprovechamiento de recursos donde prima la reducción, la reutilización y el reciclaje, así como el uso de materiales biodegradables a fin de generar la menor cantidad de desechos y daños al medio ambiente.
Desde el PNUD tenemos la convicción de que es posible avanzar hacia un El Salvador más circular. Comencemos transformando nuestra manera de pensar y tomando acción desde nuestros contextos, demandemos compromisos, individuales y colectivos de todos los sectores.